Escena en Sevilla

Mucho se ha hablado sobre lo que hace o deja de hacer Anna Von Hausswolff, pero lo cierto es que cuando uno trata de sumergirse en su obra, solo le queda una certeza al salir: Anna Von Hausswolff hace lo que le da la real gana.

En 2020 Anna nos sorprendía con un álbum completamente instrumental, cuyo tono elegíaco se ajustaba a la perfección a los tiempos que cabalgaba, con una pandemia asolando el planeta bajo la mayor incertidumbre que recordamos en un siglo. Tomando como punto de partida conceptual el Sacro Bosco de Bomarzo en Italia, “All Thoughts Fly” se revela especialmente complejo y atmosférico para estar grabado con un solo instrumento: el órgano de Örgryte New Church, en Gotemburgo.

 Pero Anna no es de quedarse demasiado tiempo en un solo lugar. Antes de todo esto venía de amalgamar neoclassical darkwave, drone, post metal y hasta una nueva denominación en honor a su trabajo, el pop funeral, trabajos en los que la voz de Anna se mueve entre desgarradora y sinuosa para traernos de vuelta una suerte de años 70 del rock que se revelan mortecinos y espectrales. Envuelta en sonidos contundentes, la melancólica belleza de su voz fluye como un presagio en trabajos como “Dead Magic” 2018 para transitar sin detenerse por las remembranzas de la tragedia.

Su ecléctica e inquieta búsqueda la han llevado a colaborar con formaciones tan dispares como Wolves In The Throne Room, Swans, Sunno o Yann Tiersen, una búsqueda que florece salvaje en su espectacular “Live at Montreux Jazz Festival” (2022) cuya réplica esperamos poder disfrutar el próximo 11 y 12 de octubre en Madrid y Sevilla respectivamente. ¡Allí nos vemos!

Anna Von Hausswolff

En el rock experimental de Anna Von Hausswolff todo son hitos: ha creado una nueva sonoridad para el órgano de tubos; ha demostrado que hay un punto en el que los caminos del doom metal, del pop experimental y del rock progresivo se cruzan; ha colaborado con Wolves in the Throne Room y Tribulation; ha seducido tanto a Swans (ha sido telonera del grupo en varias ocasiones) como a David Byrne (la invitó al Meltdown que comisionó en Londres); ha escrito partituras para acompañar obras de teatro; ha girado por Europa, Asia y Estados Unidos. Pero, ¿le queda algo por hacer a Anna Von Hausswolff? Pues sí, todo: la música de esta artista de Göteborg es tanto una incuestionable realidad en presente como una excitante promesa de un futuro.